Entra en este artículo en el que hablaremos cómo es posible ser un Nacido de nuevo. Un paso trascendental, que es necesario dar como cristianos si queremos ver el Reino de Dios.
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Nacido de nuevo
En el primer capítulo del evangelio de Juan, vemos que Jesús tiene el encuentro con el ministerio profético versado en la ley, Ministerio que estaba representado en el profeta Juan el Bautista, un hombre que por donde caminaba profetizaba de la siguiente manera:
“Este es aquel de quien dije: El que viene después de mí ha llegado a ser antes de mí porque era primero que yo”. 16 Porque de su plenitud todos nosotros recibimos, y gracia sobre gracia. 17 La ley fue dada por medio de Moisés, pero la gracia y la verdad nos han llegado por medio de Jesucristo.” (Juan 1:15-17 – RVA 2015)
Aquí Juan el Bautista nos habla de Jesús, el nuevo profeta del nuevo tiempo de la Gracia. Luego en el capítulo tres del mismo evangelio de Juan podemos ver el encuentro de dos maestros:
Jesús y Nicodemo
Nicodemo, el maestro que representaba a la escuela de la ley va al encuentro de Jesús, representante de la escuela de la Gracia, la escuela del Espíritu y este le Dice: Si quieres ver el Reino de Dios, debes ser un Nacido de Nuevo.
Juan 3:1-7 (TLA):
“1-2 Una noche, un fariseo llamado Nicodemo, que era líder de los judíos, fue a visitar a Jesús y le dijo:
-Maestro, sabemos que Dios te ha enviado a enseñarnos, pues nadie podría hacer los milagros que tú haces si Dios no estuviera con él-.
3 Jesús le dijo: -Te aseguro que si una persona no nace de nuevo no podrá ver el reino de Dios.
4 Nicodemo le preguntó: – ¿Cómo puede volver a nacer alguien que ya es viejo? ¿Acaso puede entrar otra vez en el vientre de su madre?
5 Jesús le respondió: -Te aseguro que, si uno no nace del agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. 6 Todos nacen de padres humanos; pero los hijos de Dios sólo nacen del Espíritu. 7 No te sorprendas si te digo que hay que nacer de nuevo.
Nacido de nuevo: Un ministerio, dos maestros, dos escuelas
Antes de analizar el significado del concepto nacido de nuevo para un cristiano, es conveniente observar el contexto de lo que se estaba dando en este encuentro. Al encontrarse Jesús con Nicodemo, no solo se estaba dando el encuentro entre dos personas, sino que también se estaban encontrando dos hombres que compartían un mismo ministerio, el de enseñar e instruir, es decir, dos maestros.
No obstante, estos dos maestros tenían diferente forma de enseñar porque la naturaleza de su escuela era diferente. Nicodemo era un líder religioso y maestro del viejo pacto, y Jesús traía con Él la enseñanza del Reino de Dios, es decir, la escuela del Espíritu y del nuevo pacto de la Gracia.
El maestro Nicodemo va de noche a ver a Jesús, porque tanto él como otros líderes judíos habían vistos los prodigios y señales que este hombre venía realizando por donde caminaba.
Nicodemo podía percatarse que Jesús enseñaba de manera diferente, porque él a pesar de ser conocedor de la ley mosaica y maestro también, no comprendía sus enseñanzas. Sin embargo, sí se percató y pudo discernir que Dios estaba con Jesús y que había sido enviado por Él a enseñar sobre el Reino de los Cielos.
Juan 3:2 (TLA):
“-Maestro, sabemos que Dios te ha enviado a enseñarnos, pues nadie podría hacer los milagros que tú haces si Dios no estuviera con él-.”
Se encuentran durante la noche
Nicodemo además se acerca a Jesús de noche, quizás por miedo o vergüenza, por el hecho de ser un fariseo y líder prestigioso de los judíos, quienes perseguían y acusaban a Jesús, no obstante, lo cierto es que Nicodemo fue valiente al ir al encuentro de Jesús.
Nicodemo abre su encuentro con Jesús reconociendo en Él a un Maestro, a un Rabí, además de reconocer en su presencia que no comprendía el lenguaje que Jesús usaba, aun siendo Nicodemo un maestro.
Nicodemo estaba siendo honesto y sincero, pero de verdad él no podía entender este nuevo lenguaje. Y es que era el lenguaje de la revelación verdadera, la revelación por el Espíritu de la Palabra. Nicodemo no entendía el significado de las palabras de Jesús “Nacer de nuevo”.
Nacido de nuevo ¿Qué significa?
El concepto nacido de nuevo se traduce en el significado literal de Nacido del Espíritu. Tal y como le responde Jesús al final a Nicodemo, como humanos todos nacemos de un padre y una madre terrenal.
Sin embargo, para ser hijos de Dios, es necesario nacer del agua y del Espíritu. Nacer de nuevo significa también nuevos comienzos, en este caso nueva vida en el espíritu, nuevo comienzo como ciudadano del reino. Es por ello que la mentalidad de parches no es un diseño del Reino de Dios.
Mateo 9:16 (RVA-2015)
“16 Nadie pone parche de tela nueva en vestido viejo, porque el parche tira del vestido y la rotura se hace peor.
Porque nada de lo que traemos de nuestra vida natural, antes de nuestro encuentro con Jesucristo, de nada nos sirve. Nacido de Nuevo es literalmente una nueva vida en Cristo Jesús, en este sentido el apóstol Pablo nos enseña claramente:
“Ahora que estamos unidos a Cristo, somos una nueva creación. Dios ya no tiene en cuenta nuestra antigua manera de vivir, sino que nos ha hecho comenzar una vida nueva.” (2 Corintios 5:17 – TLA)
Es por ello que el que está verdaderamente “En Cristo” evidencia verdaderos cambios. Mientras que el no estar verdaderamente en Cristo, sólo puede evidenciar “cambios aparentes”, estos creyentes a la hora de la prueba manifiestan su verdadera esencia o naturaleza.
De allí la importancia, que nosotros como cristianos tengamos una lectura correcta de nuestro nuevo nacimiento. Para ello debemos preguntarnos: ¿Qué estoy arrastrando aún de lo viejo, de la vieja naturaleza? ¿Qué me falta aún, para ser un verdadero nacido de nuevo?
Una “nueva creación” es ser un nacido de nuevo de adentro hacia afuera. Este cambio tiene que ser evidente, que las personas lo noten. Sigue con nosotros leyendo los siguientes artículos:
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