Te invitamos a entrar en este artículo donde podrás conocer junto a nosotros qué celebramos los cristianos el domingo de pentecostés. Así como determinar cuál es la importancia de esta conmemoración para los creyentes.

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¿Qué se celebra el domingo de pentecostés?
El domingo de Pentecostés es una festividad solemne para todo el pueblo cristiano. En esta festividad se celebra y conmemora el cumplimiento de la promesa de Dios, dada por Jesucristo a sus primeros discípulos:
Hechos 1:4-5 (RVC):
“4 Mientras estaban juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que les dijo: -Esperen la promesa del Padre, la cual ustedes oirán de mí. 5 Como saben, Juan bautizó con agua, pero dentro de algunos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo-.”
En el tiempo de los apóstoles, Jesucristo les aseguró que Dios Padre les mandaría y haría descender sobre ellos su Espíritu Santo, el cual los guiaría y protegería en la misión de difundir el evangelio a todas las naciones del mundo, porque habitaría en cada uno de ellos.
De manera, que este acontecimiento también marca el comienzo de la iglesia cristiana y aún más, el hecho de que a partir de allí el Espíritu Santo habita en cada miembro del cuerpo de Cristo. Siendo este otro relevante e importantísimo motivo para celebrar cada año el domingo de pentecostés. Sabes ¿Cuáles son las características de la Iglesia que la hacen ser el Cuerpo de Cristo? Conócelas ingresando al artículo, El cuerpo de Cristo: ¿Metáfora o verdad?
¿Por qué el nombre de pentecostés?
La definición etimológica del término pentecostés, es que se origina de la palabra griega πεντηκοστή, transliterada a pentēkostḗ. A su vez este último término se origina de la unión de dos raíces griegas, que son a saber:
- πεντα, pentē o penta: Que indica cinco, raíz usada también como prefijo, ejemplo pentagrama (conjunto de cinco líneas) o pentatlón (competición atlética de cinco pruebas).
- kostḗ, Konta: Sufijo griego usado para indicar la decena.
De manera que pentecostés indica cinco decenas, equivalente a la cifra numérica cincuenta. Ahora bien, la razón de que pentecostés lleve este nombre que significa cincuenta y que además esté asociado con el cumplimiento de la promesa dada por Jesucristo a los apóstoles.
Se debe a que el Descenso de Espíritu Santo sobre los primeros miembros de la iglesia aconteció el quincuagésimo día contados a partir del día de la pascua de resurrección de Jesucristo. Las iglesias cristianas de todas las denominaciones en el mundo entero celebran el domingo de pentecostés, el quincuagésimo día contados a partir de la celebración del domingo de pascua, ambas fechas son movibles de acuerdo al calendario cristiano.
Domingo de pentecostés: Herencia del Antiguo Testamento
El domingo de pentecostés es una celebración que es herencia o representación, de una de las fiestas solemnes de la cultura judía de las que habla el Antiguo Testamento. La celebración de pentecostés en el Antiguo Testamento equivale a la celebración judía de la fiesta de las semanas, denominada en hebreo como El Shavuot que significa Las Semanas.
Los cincuenta días en el Antiguo Testamento y antes de Jesucristo eran contados a partir del día en que se llevaba a cabo la ofrenda mecida de la pascua, otra de las fiestas solemnes judía. Al cumplirse estos cincuenta días, el pueblo judío celebraba y celebran hoy día sus descendientes, el Shavuot o fiesta de las Semanas, fieles al mandato perpetuo de Dios para ellos:
Levítico 23:15 (RVA-2015):
“Contarán siete semanas completas desde la mañana siguiente al sábado, desde el día en que presentaron el manojo de espigas de la ofrenda mecida.”
El legado en el Nuevo Testamento
Como vemos el Shavuot, fiesta de las semanas o pentecostés judío se cuenta desde la pascua judía en la que se rendía culto y honra a Dios con la ofrenda mecida, el grano nuevo entregado de forma voluntaria.
El legado de esta pascua judía en el Nuevo Testamento es Cristo, quien se entregó voluntariamente en obediencia a su Padre y Dios, para la expiación de nuestros pecados. Cristo el mejor grano nuevo, la ofrenda mecida, el Cordero inmolado, puro y sin manchas.
Cristo es nuestra verdadera pascua, Él fue una sola vez a la cruz y allí venció a la muerte para siempre. Es decir, que Jesucristo nos justificó ante Dios en un solo sacrificio y para siempre.
Por esto en el Nuevo Testamento el domingo de pentecostés se celebra cincuenta días después de la crucifixión de Jesús. Contados según el calendario cristiano por ser la pascua una fecha movible anualmente.
Y así como el pueblo judío en Shavuot presenta por mandato perpetuo las primicias o sus ofrendas voluntarias según los bienes con que el Señor su Dios los haya bendecido. La Iglesia de Cristo hoy día también lleva al alfolí las primicias del año o mejor aún presenta su corazón voluntariamente en ofrenda de adoración a su Señor y Dios.
Para entender mejor lo que representa tener un corazón agradecido a Dios y rendido a los pies de Cristo. Te invitamos leer el artículo, Toma tu cruz y sígueme: ¿Qué quiere decir esto?
Esta es una importante e imprescindible condición que debe cumplir una persona para ser un verdadero discípulo de Jesús. Hoy esta instrucción sigue vigente, Jesús nos dice a cada quien: ¿Quieres seguirme? ¿Quieres ser parte de mi Iglesia? ¿Quieres ser mi discípulo?, niégate a ti mismo, toma tu cruz y sígueme todos los días.
Puntos claves que celebrar el domingo de pentecostés
Para comprender mejor por qué debemos celebrar con solemnidad el domingo de pentecostés. Conviene saber algunos puntos relevantes de esta fecha, veamos:
- Es una festividad oportuna para ofrecer a nuestro Señor y Dios lo mejor de nuestros primeros frutos. En agradecimiento a sus bendiciones y como nos ha proveído.
- Celebrar la cena del Señor en conmemoración de nuestra pascua que es Cristo. Jesucristo es nuestro pan de vida
- Conmemorar el cumplimiento de la promesa de Dios padre de enviarnos el Espíritu Santo.
- Celebrar el que somos participantes de la vida en Cristo y que somos testigos de Él.
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